Una mañana, Fidel, el marido de Ana, se acercó a Dolarea con una idea que le rondaba la cabeza. Ana cumpliría en breve 50 años, y quería hacer de ese día, un día muy especial para su mujer. Pensaba en una fiesta sorpresa, tipo romería vasca, con algo de música y picoteo. Una velada informal, de manera que los invitados pudiesen interactuar, huyendo de la típica celebración a mesa puesta.
Fidel transmitía ilusión, pero necesitaba ordenar de alguna manera sus ideas para la celebración. Según le iba escuchando, más me apetecía organizar este evento. Estaba segura de que íbamos a conseguir algo realmente sorprendente para Ana.
Comenzamos a definir todos los detalles. Elegimos el palacio de Igartza, justo en frende de Dolarea, para llevar a cabo el evento. Su patio y su balconada, eran un marco incomparable para la ocasión. Para la comida, nos decantamos por un lunch, acompañado de un rincón de talos, mesa de bebidas, barrica de sidra, un candy bar, y una mesa de dulces y café.
Para ambientar, colocaríamos banderines en la balconada del palacio, barricas a modo de mesa, un candy bar acorde a una romería vasca, y una recepción a la altura, con pañuelos personalizados para todos los asistentes.
Pensamos en la ambientación musical acorde a canciones de la época. Y entre los asistentes contaríamos con «pequeños dantzaris», y unos jovencísimos cantante y violinista.
Para «dejar huella» del evento, y nunca mejor dicho, nos decantamos por la opción de un árbol de huellas, en el cual los asistentes plasmarían sus huellas a modo de hoja, en un tronco de árbol dibujado en papel.
Tras un tiempo coordinando todo, llegó el gran día. Los familiares y amigos de Ana, fueron llegando al palacio poco a poco, para poder ensayar las sorpresas que le tenían preparadas.
Aunque la espera se hizo larga por las ganas que se percibían de que todo comenzara, llegó Ana, acompañada de Fidel. Y menuda sorpresa se llevó!!! Todos sus amigos y familiares se habían juntado para hacerle pasar un día estupendo, y ella no tenía ni idea.. Y así fué…
Realmente estoy satisfecha del trabajo en equipo que hicimos ese día para llevar el evento a cabo. Me encantó saludar a Ana, desbordaba alegría.. Y por supuesto escuchar las palabras de Fidel diciendo: «Habéis plasmado justo lo que tenía en mente».
Y para que podáis ver de lo que os hablo, os dejo con el reportaje fotográfico del evento.
Esperamos vuestros comentarios!
Un saludo y hasta el próximo evento!
Elixabet Canales
Responsable de eventos
